Ingeniería y Carga Laboral

El 1 de julio se celebra el Día del Ingeniero y la ingeniera, una fecha dedicada a honrar el trabajo y las contribuciones de los profesionales de la ingeniería. Este día, también se celebra el día de la Ingeniera, reconociendo que las mujeres desempeñan un papel igualmente crucial en esta disciplina, contribuyendo con su conocimiento, habilidades y perspectiva única a la solución de los retos más complejos del mundo. La celebración del Día del Ingeniero en México surgió el 29 de octubre de 1973 cuando el entonces Secretario de Comunicaciones y Transportes, Eugenio Méndez Docurro, le propuso al Presidente de la República, Luis Echeverría Álvarez, establecer el 1 de julio como Día Nacional del Ingeniero.
Como profesionistas en ingeniería, es posible que se enfrenten a proyectos desafiantes y exigentes que requieren muchas horas, plazos ajustados y resolución de problemas complejos. Si bien esto puede ser gratificante y estimulante, sin embargo, también puede afectar su equilibrio entre el trabajo y la vida personal y afectar su salud, felicidad y productividad.
Uno de los principales factores que contribuyen a lo anterior, es la carga de trabajo, la cual se define como “el conjunto de requerimientos psico-físicos a los que el trabajador se ve sometido a lo largo de la jornada laboral”. En toda actividad laboral, el trabajo físico y el trabajo mental coexisten, en proporción variable dependiendo de la tarea. Dentro de las actividades de los ingenieros e ingenieras existe un crecimiento de los requerimientos mentales, por lo cual constantemente se cae en una sobrecarga de trabajo.
Algunos tips que pueden ayudar, son los siguientes:
- Priorizar y planificar: Uno de los primeros pasos para administrar su carga de trabajo es priorizar y planificar sus tareas y objetivos. Logrando identiifcar las tareas más importantes, urgentes y valiosas que se alinean con los objetivos y plazos de su proyecto.
- Delegar y colaborar: Otra forma de reducir la carga de trabajo es delegar y colaborar con otras personas. Puede aprovechar las habilidades, la experiencia y las perspectivas de sus colegas y miembros del equipo.
- Automatiza y optimiza: Una tercera estrategia para manejar su carga de trabajo es automatizar y optimizar sus procesos y flujos de trabajo. Puede utilizar diversas herramientas y tecnologías para agilizar y simplificar sus tareas.
- Establecer límites y fronteras: Establecer límites para ti y para los demás. Necesita proteger su tiempo, energía y recursos de demandas innecesarias y excesivas. Aprende a decir no a las solicitudes o tareas que no están alineadas con tus prioridades, objetivos o valores.
- Tomate descansos y recarga energías: Programe un tiempo para usted todos los días para relajarse, descansar y disfrutar de sus pasatiempos e intereses.
- Busca comentarios y apoyo: Buscar la retroalimentación y el apoyo de los demás. Puedes beneficiarte de los consejos, la orientación y el aliento de tus gerentes, mentores y compañeros.
Es importante disfrutar el trabajo y aprender a equilibrar el trabajo con tu vida personal-familiar.
Ansiedad, ¿Cómo identificarla?

La ansiedad, aunque hoy se asocia con algo negativo, es una emoción natural que ha acompañado a la humanidad desde sus orígenes. Forma parte de nuestra capacidad de anticipar peligros y adaptarnos al entorno. Sin embargo, en el contexto actual, sus manifestaciones pueden intensificarse y afectar nuestra salud mental.
¿Qué es la ansiedad?
- Es una emoción que anticipa el peligro, el cambio o la amenaza, ya sea real o imaginaria.
- Ha sido interpretada de diversas maneras a lo largo de la historia según el contexto cultural, médico y religioso.
- Puede presentarse en niveles normales, que no interfieren con la vida cotidiana, o en niveles intensos y persistentes, que afectan el bienestar y requieren atención.
Factores que aumentan la ansiedad hoy
- Presión social, laboral y política.
- Estilos de vida acelerados.
- Exceso de responsabilidades y falta de descanso.
Señales de alerta
- Cambios en el comportamiento y rendimiento.
- Aislamiento, irritabilidad, fatiga constante.
- Quejas físicas: dolores, problemas digestivos, sudoración.
- Frases como: “No puedo más” o “No me alcanza el tiempo”.
Ansiedad en el trabajo
- Puede pasar desapercibida por miedo al juicio.
- Afecta la productividad y la seguridad, especialmente en puestos de riesgo.
Cómo prevenirla en la empresa
- Crear espacios de escucha y apoyo.
- Capacitar a líderes para detectar señales.
- Fomentar una cultura de autocuidado y salud mental.
Reconocer la ansiedad a tiempo permite prevenir problemas mayores y cuidar el bienestar de todos.
La incertidumbre vs la adaptación al cambio.

El siglo XXI está siendo sin duda una de las épocas de la humanidad donde se están sucediendo, uno tras otro y cada vez de forma más acelerada, cambios muy significativos en la sociedad. Podremos experimentar momentos de incertidumbre ante las circunstancias que nos rodean, que pueden ser variables, y muchas veces no podemos prever lo que sucederá.
En la actualidad, y sin haber finalizado lo que se conoce como transformación digital, la Inteligencia Artificial está irrumpiendo en todos los sectores automatizando muchos procesos en todas las áreas de la vida. En este escenario, te invitamos a hacer a un lado la incertidumbre y dar paso a una de las habilidades blandas que contribuirán al tu pleno desarrollo personal y profesional: la adaptación al cambio.
Te compartimos estos 10 consejos prácticos para adaptarte al cambio.
- Aceptar el cambio como una parte inevitable de la vida y que está fuera de nuestro control. ¡Acéptalo en lugar de luchar contra el!.
- Flexibilidad: ser flexibles ante las nuevas situaciones implica estar dispuesto a modificar nuestras ideas, creencias o comportamientos cuando sea necesario.
- Resolución de problemas: los problemas existen para ser resueltos. Son oportunidades de aprendizaje.
- Mentalidad abierta: ver los cambios desde diferentes perspectivas y estar dispuestos a considerar nuevas ideas, oportunidades y soluciones.
- Practica la empatía: ponernos en el lugar de otras personas y tratar de entender sus puntos de vista y emociones ayuda a manejar mejor los cambios.
- Formación: estar siempre en constante aprendizaje. Cursos, talleres, webinars, libros, blogs, podcasts… ¡prepárate ante cualquier escenario!
- Atención en el presente: actuar hoy para afrontar el mañana, es una buena práctica de adaptabilidad al cambio.
- Alimenta tu curiosidad: estar abiertos a explorar nuevas ideas, probar diferentes enfoques y, en definitiva, aceptar y abrazar el cambio.
- Salir de la zona de confort: desafiar nuestras propias limitaciones y rutinas de vez en cuando. Experimentar cosas nuevas, explorar nuevos territorios.
- Retos: ante un cambio, enfócalo como un reto y una oportunidad para crecer. Ponte retos y trata de alcanzarlos, nos obliga a ajustar nuestras estrategias y a buscar nuevas soluciones.
¡En Capadi compartimos nuestro conocimiento y experiencia para facilitar tu adaptación al cambio!