Comunicación Asertiva

¿Qué es la comunicación asertiva?
La comunicación asertiva es fundamental para un ambiente positivo en el lugar de trabajo. Este tipo de comunicación nos permite dialogar con calma y respeto, expresando lo que queremos decir, pero sin herir los sentimientos de las otras personas.
Un ejemplo para ilustrar la comunicación asertiva es: Un cliente ofuscado reclama a un cajero bancario. Este último elige cómo decir las cosas para no frustrar más al cliente, poniéndose todo el tiempo de su lado y escuchando su reclamo con atención y seriedad, añadiendo pequeñas frases de acompañamiento que hagan saber al cliente que no es su culpa directa, sino que él está allí para ayudarlo a solucionar el inconveniente.
Ejemplos de comunicación no asertiva y si asertiva
1. Asume en lugar de preguntar 1. Pregunta y no supone
2. Juzga y generaliza 2. No difunde chismes
3. Se Victimiza 3. Pone limites
4. No establece contacto visual 4. Genera confianza
5. No pone límites 5. Utiliza la escucha activa
Como practicar la comunicación asertiva en el trabajo
- Si tienes dudas sobre un asunto determinado, en lugar de suponer o acumular confusión,pregunta al interlocutor.
- En el diálogo con tus compañeros de trabajo, utiliza los nombres de esas personas con más frecuencia. Un nombre personaliza y humaniza la conversación porque es una demostración de interés.
- En el lenguaje presencial,mira a los ojos porque el contacto visual favorece la confianza.
- Utiliza con más frecuencia la palabra “nosotros” porque en el ámbito empresarial el trabajo en equipo es muy importante. Aunque observes tu realidad desde tu punto de vista, es positivo que intentes tener una visión de contexto.
Ventajas de la comunicación asertiva
- Salud mental
- Mejora la autoestima
- Mejora relaciones interpersonales
- Aumenta la comprensión
Tips para hacer mejor uso del tiempo en el trabajo.

¿Qué es la procrastinación y cómo evitarla?
Un ejemplo es cuando llegamos a la oficina con nuestra mejor disposición y justo cuando estamos dispuestos a comenzar a trabajar nos llega una notificación de Facebook “tu amigo a compartido una foto contigo”.
Es así como decidimos meternos en la red social por un momento. "Es solo por un segundo" - nos decimos - total, es temprano y todavía tenemos todo el día para cumplir con nuestras obligaciones de turno.
Una foto se convierte en un video y un video se convierten en varias horas navegando las aguas infinitas de Internet. Es así como llega la tarde y el final de nuestra jornada laboral nos encuentra con nada de tiempo y muchas tareas que no cumplimos. O quizá no se trate de solo distracción, sino de querer evitar el estrés de ocuparnos de cosas importantes que creemos van a ser difíciles de lograr o no nos sentimos capacitados de llevar adelante.
A esta práctica se le conoce como procrastinar y consiste justamente en postergar o posponer actividades, tareas, responsabilidades o diligencias que debemos hacer inmediatamente, en su lugar las sustituimos por otras situaciones que son irrelevantes, pero más agradables para nosotros.
El peligro de procrastinar
Caer en esta práctica ya es bastante malo cuando lo haces en una oficina donde tienes un horario establecido para cumplir con el trabajo al no poder alcanzar los objetivos de tu empresa.
Si por momentos no tienes el autocontrol, y te sorprendes perdiendo horas útiles por estar viendo videos de animales en las redes sociales, o simplemente planificando mal tus prioridades, es momento de darle un vuelco a tus hábitos laborales y comenzar a ponerse manos a la obra para convertirte en el trabajador estrella.
¿Cómo puedo evitar la procrastinación?
- Separa las tareas: Es probable que tengas una pila de tareas por hacer diariamente. Tener tanto trabajo acumulado desmotiva a cualquiera y hará que te sea más cuesta arriba comenzar.
Un truco que te recomendamos es separar las tareas en tareas más pequeñas que puedas lograr en una menor cantidad de tiempo: Una vez que termines alguna de estas actividades, date un tiempo corto de descanso y comienza con la otra. ¡En menos tiempo del que esperas acabarás con todo el trabajo!
- Aprende a delegar: Una de las razones por las cuales te puedes encontrar con mucho trabajo es que estás intentando abarcar más de lo que puedes manejar. La solución es delegar responsabilidades entre los miembros de tu equipo, asegurándote que todos tengas una repartición equitativa de tareas.
- Ponte recompensas: Si te cuesta mantenerte motivado, ¡ponte recompensas cuando logres culminar una tarea importante! Bien sea permitirte 15 minutos de descanso, comprarte un dulce o ver un capítulo de tu serie favorita. Si te pones recompensas tendrás un incentivo para cumplir con tus responsabilidades.
- Tómate el tiempo: Cuando tienes que hacer diferentes tareas es importante que seas sincero contigo mismo y estés consciente de cuánto tiempo realmente te toma hacer cada una.
Una de las principales razones por las cuales las personas procrastinan es porque viven con la falsa ilusión de que tienen más tiempo del real para hacer las actividades del día. Si conoces realmente cuánto te tardas en hacer algo, sabrás dividir eficazmente tus horas de productividad.
- Dales un respiro a las redes sociales: Por más divertidas que puedan ser, lo cierto es que representan una gran fuente de distracciones. Por esta razón trata de trabajar con ninguna red social abierta y desactiva las notificaciones. Si la tentación es mucha, existen aplicaciones o extensiones del navegador que se encargan de bloquear las páginas que elijas por una cantidad determinada de tiempo.
Nota: Procrastinación no se trata solo de no perder el tiempo, sino que también debes intentar hacer lo mejor del tiempo que tienes. Hay diversas formas de organizar y hacer más efectivo el uso de tu tiempo.
Estrés Postráumatico

Cuando el cerebro sufre un trauma
El Trastorno por Estrés Postraumático es una afección de salud mental que pueden desarrollar algunas personas tras experimentar o ver algún evento traumático.
- El evento puede amenazar a la propia vida o a la de otra persona.
- Un evento traumático puede ser: una guerra, un desastre natural, un accidente de tránsito, una agresión sexual, robos violentos y violencia.
- El riesgo de sufrir Estrés Postraumático aumenta si la persona reacciona con un miedo u horror intenso, o sentimientos de desamparo al enfrentar la situación traumática.
Síntomas del estrés postraumático
- Las ´personas expresan esta situación en ocasiones manifestando frases como: “Pensé que me iba a morir” y “Nadie me ayudó”.
- Quien padece de Estrés Postraumático vive el acontecimiento traumático como si aún no hubiera quedado atrás y estuviera invadiendo continuamente en el presente.
- Los pensamientos son muy recurrentes e invasivos. La persona puede desarrollar pensamientos suicidas. Por este motivo la prevención es importantísima.
- El cuerpo se activa como si viviera el acontecimiento traumático una y otra vez, lo que lleva al cerebro a tratar de evitar todo lo que le recuerde a este trauma.
- Los síntomas del Trastorno por Estrés Postraumático pueden comenzar dentro de un mes del suceso traumático, pero a veces pueden no aparecer hasta años o meses después. También pueden ir y venir durante muchos años.
- Estos síntomas afectan considerablemente a las situaciones sociales, laborales y a las relaciones personales. También pueden interferir en la capacidad de hacer las tareas habituales de todos los días.
Cómo ayudar a una persona con trastorno de estrés postraumático
- Escucha con atención. Hay que tomar en cuenta que siempre es de gran ayuda para la sanación de cualquier enfermedad, incluso física, que la persona que la sufre se sienta escuchada y realmente atendida, ya que en muchas ocasiones se le deja de prestar la atención que se merece.
- Motívalo a comenzar una terapia psicológica. Es necesario que la persona con este tipo de trastorno comience lo antes posible una terapia psicológica, ya que de esta manera podrá salir adelante y curarse realmente.
- Dale su espacio. Es importante no agobiar a la persona que sufre de este padecimiento, ya que la ayuda resultará contraproducente. Se debe siempre de brindarle el espacio suficiente a la persona afectada y no invadirla demasiado.
- Sé tolerante. Recuerda que, generalmente, las personas que padecen este tipo de trastorno suelen encontrarse muy volubles e irritarse demasiado. Ten en cuenta que este tipo de reacciones es un síntoma propio de la enfermedad, no te lo tomes personal y trata de mantener la calma.